Como empresa tener estrategias de marketing bien definidas y establecidas es más que un método para crecer, es una necesidad. Es importante contar con campañas efectivas en los distintos ámbitos del mercadeo, para captar más clientes y asegurar los ya existentes.

Hay diferentes formas y tipos de marketing que pueden ser ejecutados exitosamente, uno de ellos –aunque es de los más antiguos pero todavía vigente- es el email marketing. Se le conoce también como emailing o e-mailing y funciona como una vía de comunicación directa con los clientes potenciales.

¿Qué es el email marketing?

Esta función se basa en una combinación entre comunicación y marketing directo. Trata del envío masivo de correos electrónicos a una lista determinada de contactos. ¿El objetivo? llegar  de manera sencilla y eficaz a los clientes potenciales, no solamente a las bandejas de entrada sino que se llega directamente a la mano del cliente debido a los dispositivos móviles, esto se debe a que muchas personas tienen en su teléfono inteligente o tablet la disposición de sus correos tanto personales como profesionales.

Casi la mitad de los emails son abiertos a través de los dispositivos móviles, por lo tanto es necesario que los diseños sean responsive.

Con el email marketing es posible generar un feedback de los productos o servicios que ofrezcan una compañía, así como también la promoción de marca. Mediante esta técnica pueden hacerse crecer las ventas y las oportunidades de estas cruzadas.

Las ventajas más grandes de contar con una buena campaña de email marketing son la emisión de mensajes de forma instantánea a distintos usuarios, la relación directa que se puede generar con los suscriptores y la retroalimentación de la marca o compañía.

La línea entre tener éxito o fracasar con esta estrategia es la creación de una campaña eficiente y positiva para la empresa y esto pasa por personalizarlas efectivamente.

Consejos para personalizar campañas de email efectivamente

Lo más importante de una campaña para email marketing correcta es crear una fiel y duradera relación entre los usuarios, para que de ese modo puedan ser convertidos en clientes. Pero sobre todo, que la propuesta sea personalizada y tenga el distintivo de la marca impregnado.

Algunos consejos para lograr esta tarea de manera efectiva pasan por segmentar la base de datos de los usuarios. Es fundamental saber a quién te vas a dirigir, a pesar de que son correos masivos no deben parecer sin filtro y generalizados, pues el usuario de la actualidad exige que las marcas le hablen especialmente. Con la segmentación de la base de datos es posible elegir un grupo de gente como público objetivo que sea de un tipo específico, para así hacer los mensajes más personalizados y hacerle sentir al receptor que fue escrito para él.

Asimismo, es prioritario trazar los objetivos de la compañía con tal campaña. ¿Qué es lo que se busca, vender, ganar suscriptores, fidelizar, conseguir público para un  evento? Todas estas preguntas deben ser respondidas antes de crear la estrategia, para tener claro cómo se implantará el mensaje. Sea cual sea el objetivo, teniéndolo establecido será posible conocer con cuáles métricas analizar si las metas fueron alcanzadas al concluir la campaña, lo que debe mejorarse o añadirse.

También es ideal identificar las oportunidades. Para esto es ideal ver el funnel de ventas y de acuerdo a lo que se halle a favor se puede crear un plan que vaya en paralelo con el público meta y con los objetivos trazados.

Por otro lado, es muy funcional diseñar un flujo de trabajo con precisión y brevedad, se conoce también como workflow y se trata de un proceso de nutrición mediante el email, en donde la compañía tiene interacción directa con el usuario objetivo, allí puede hacer invitación de realizar alguna acción como adquirir algún producto, leer un artículo, visitar la web, descargar material o ir a cierto evento social.

A la hora de redactar los emails que se enviarán en la campaña es fundamental que se siga una secuencia lógica y que sean amenos para el lector, pero sobre todo que se enfoque en el usuario. Hoy en día, los lectores saben cuando algo es generalizado o no está personalizado, por lo que sentarse a redactar los email requiere de dedicar más tiempo y de expresarse de forma más cercana a los usuarios.

Otro buen consejo es optimizar el mensaje según los distintos dispositivos móviles. Averiguar cuáles son los dispositivos más usados por los usuarios es una de las tareas para adaptar el mensaje al tipo de pantalla, permitiendo que sean legibles y fáciles de abrir.

¿Por qué debemos personalizar las campañas de email?

Personalizar estas campañas de email es uno de los puntos clave para lograr el éxito. Esta palabra puede dirigirnos a colocar el nombre del usuario, el lugar donde vive u otros datos, pues aunque esto puede servir, la verdadera personalización en el email marketing está en que los correos estén ajustados a los gustos y necesidades personales de cada usuario.

Por supuesto, es muy difícil sentarse a redactar un correo para cada persona o conocer con exactitud lo que desean, pero hay algunos trucos para personalizar fácilmente la estrategia y crear una sensación de cercanía y de contacto personal.

En primer lugar es importante conocer a los contactos. Estos no pueden ser solo un nombre y apellido, lo ideal es obtener toda la información posible sobre ellos para segmentar, como por ejemplo sus intereses, costumbres o necesidades, los horarios, si han comprado o no algún producto de la marca, etc.

Luego de conocer las preferencias viene el proceso de segmentación de usuarios, para agrupar a las personas según los tipos de necesidades y gustos que tengan. De este modo se pueden crear campañas personalizadas para cada segmento y lograr la máxima personalización posible.

Así más allá de poner simplemente el nombre del usuario, se logra personalizar de verdad. Este trabajo es muy importante para cualquiera que desee crear una campaña de email marketing realmente eficaz y con resultados medibles.